Sinopsis
No hay dos muertes iguales. A pesar de las similitudes que algunos casos puedan tener, y que invitan a pensar por semejanza, se trata de una instancia de una singularidad extrema, que genera una significación distintiva. Al mismo tiempo, no es un fenómeno que haya permanecido inalterable a lo largo de la historia. Más bien lo contrario. Cada época delimita las muertes que tienen un impacto trascendente y que de algún modo la definen. Por ejemplo: la muerte de Alfredo Yabrán no estaba necesariamente destinada a caracterizar el fin del menemismo como cultura política. Sin embargo contribuyó a hacerlo.
Este libro, dirigido y compilado por Sandra Gayol y Gabriel Kessler, es un recorrido ejemplar sobre el modo en que determinadas muertes (y los mitos, prácticas y fantasmas que en torno a ellas se crean) impactaron en la Argentina, desde la Revolución de Mayo hasta el presente. Muertes individuales ligadas a la política, las de Ramón Falcón y Alfredo Yabrán; crímenes violentos que marcaron huellas profundas en la población; las secuelas que la Guerra de Malvinas, la represión de la dictadura y la epidemia de fiebre amarilla dejaron en la sociedad; la forma en que los medios ligan un asesinato con la inseguridad; el modo en que se han transformado los ritos funerarios en las últimas décadas.
Original y fascinante, Muerte, política y sociedad en la Argentina es una reflexión aguda y sorprendente sobre cómo la muerte ha sido pensada y sentida, de qué manera se la ha representado, qué prácticas sociales e individuales instituyó a lo largo de nuestra historia. Es decir, la forma en que los argentinos nos hemos relacionado con ella. De un modo u otro, y en absoluto indirectamente, es la forma en que nos hemos relacionado con la vida.